La Eurocámara pide apostar por la «dimensión social» frente a la austeridad para salir de la crisis de la COVID19
El Parlamento Europeo aprueba un informe sobre el sobre el Semestre Europeo para la coordinación de las políticas económicas y sociales, que reclama una «agenda social para mejorar la gobernanza económica y la salud democrática».
El Parlamento Europeo pide apostar por la «dimensión social» frente a la austeridad para salir de la crisis de la COVID-19. Así lo ha hecho al aprobar el informe (508 votos a favor; 121 en contra y 64 abstenciones) sobre el sobre el Semestre Europeo para la coordinación de las políticas económicas y sociales, que reclama una «agenda social para mejorar la gobernanza económica y la salud democrática».
La eurodiputada socialista Lina Gálvez ha reclamado «un nuevo marco económico y social que siente las bases de una Europa nueva, que mitiguen el sufrimiento y el desánimo que padece gran parte de la población europea».
Durante el debate en el Pleno del Parlamento Europeo, la responsable del informe ha abogado también por incluir indicadores económicos que sean capaces de percibir los problemas sociales que plantea la economía, al tiempo que ha defendido que se permita a todos los Estados miembros que «aprovechen al máximo el potencial que ofrece la cláusula de escape, apoyar a las empresas con dificultades y falta de liquidez, salvaguardando los puestos de trabajo y las condiciones laborales de las trabajadoras y trabajadores europeos, y para invertir en las personas y en los sistemas básicos de bienestar social».
«Las previsibles reformas nacionales deben basarse en la solidaridad, la integración, la justicia social con el objetivo de crear empleo de calidad, avanzando hacia una nueva organización social de los cuidados que no recaiga principalmente en trabajo no remunerado ni reconocido de las mujeres», ha pedido la eurodiputada.
Asimismo, ha recordado que «en una noche cualquiera en la Unión Europea, 700.000 personas duermen en la calle o en albergues (un 70% más en los últimos 10 años) o que la crisis COVID-19 ha empeorado la salud física y mental, especialmente de los grupos más vulnerables», una realidad que, según ha recalcado Gálvez, ha demostrado que «el anterior discurso político y económico ya no nos vale, y por ello, no podemos repetir los mismos errores que en la anterior crisis», ha incidido la ponente del informe.
Por último, ha dicho que el Parlamento Europeo «debe revisar todo el proceso, desde la revisión de los indicadores hasta la supervisión de las recomendaciones que se hagan a los Estados miembros».
La eurodiputada del PP Isabel Benjumea, no obstante, ha llamado «al control sobre el gasto», para evitar «un nuevo Plan E encima de la mesa, que solo es gasto, pero no inversiones que nos hagan salir más fuertes, competitivos, y resilientes».
«Es fundamental el control sobre el gasto y las reformas laborales y estructurales para que los europeos que vengan tengan oportunidades», ha dicho Benjumea: «El Semestre da recomendaciones para que haya estabilidad financiera y seamos más competitivo. Acabamos de aprobar un desembolso inmenso para la crisis de la pandemia, y esas recomendaciones no se pueden diluir porque son más importantes que nunca. Necesitamos que ese gasto se haga de la manera más eficiente, como española sé de lo que hablo».
El vicepresidente de Renew Europe, Luis Garicano (Ciudadanos), ha afirmado en el debate parlamentario: «Cuando miramos la situación económica a la que nos enfrentamos, vemos dos problemas. Por un lado, tenemos la pandemia que se está alargando y que está creando una situación económica de crisis, mucho más prolongada que la que imaginábamos. Por otro lado, tenemos un incremento muy importante de la deuda. En el lado izquierdo dicen: lo importante es la pandemia; gastemos y gastemos y gastemos ahora. Y luego, si acaso, ya pediremos que nos perdone la deuda el Banco Central Europeo; en el lado derecho se empiece ya a oír consolidación fiscal y que hay que echar el freno. Creo que ninguna respuesta es correcta: hoy tenemos que gastar mucho más, pero a la vez hay que asegurar las finanzas a medio plazo y hacerlas sostenibles. El gobierno de nuestro país está haciendo lo contrario: está gastando a largo plazo, introduciendo programas estructurales y escamoteado la ayuda que necesitan ahora mismo los autónomos».
El vicepresidente de los Verdes europeos, Ernest Urtasun (Catalunya en Comú), decía a su vez: «Han anunciado esta semana que alargaban la cláusula escape del Pacto de Estabilidad un año más. Sin embargo, es evidente que las normas actuales que tenemos no van a poder introducirse tal y como las tenemos. Todo el mundo lo sabe y por ello yo me atrevo a sugerirle la vicepresidente cinco líneas de actuación sobre las reformas que vamos a tener. En primer lugar, debemos seguir profundizando la capacidad fiscal europea. En segundo lugar, necesitamos una regla de oro para determinadas inversiones: no va a haber transición ecológica de lucha contra el cambio climático sin determinadas inversiones. En tercer lugar, deberíamos sustituir los límites de déficit por una regla de gasto que de alguna forma estableciera cómo crece el gasto nominal en los Estados miembros. En cuarto lugar, necesitamos un tratamiento diferente de la deuda en los niveles de endeudamiento que tenemos. No podemos tratarlos con las normas que tenemos y las condiciones monetarias actuales son muy distintas a cuando establecimos estas normas. Y, en quinto lugar, reforzar el diálogo macroeconómico entre los países, incluyendo sus balanzas comerciales. Desde luego, las flexibilidades que tenemos no nos van a servir para el período que vamos a iniciar después del 2023».