La X no es lo único que falta de la Gürtel
No nos confundamos. La corrupción de los últimos años no es el producto desgraciado de que la política española esté en manos de unos cuantos corruptos.
Correa ha comenzado a largar de la manera más natural, como si estuviera representando una obra mil veces ensayada en las largas horas de encarcelamiento. Pero en su perorata falta algo. Y no es poco.
Correa habla de los intermediarios, del tesorero, de personas con responsabilidad política a nivel municipal o autonómico, de comisiones y de tramas pero todo ese entramado no se puede entender sin tener en cuenta que las licitaciones y, en general, las grandes decisiones que podían dar lugar a los actos concretos de corrupción se tomaban en los ministerios. Leer artículo completo en eldiario.es